
“Si buscás en la historia de la música pop, vas a encontrar que las canciones de amor estuvieron dedicadas al amor heterosexual. Si pensamos que su función es de unir a la gente, ¿no tendrían que ser abiertas para todos?”, contó el coproductor Tom Murphy a The New York Times.
En el álbum también podemos encontrar a Kesha con su versión cambiada de “I Need a Man to Love” de Janis Joplin; St. Vincent con el tema de The Crystals , “Y luego me besó” y Ben Gibbard de Death Cab for Cutie con el éxito de los Beatles, “And I Love Him“.
“Durante años dije que no me casaría hasta que dos personas gays pudieran casarse legalmente en este país”, reconoció Kesha. El trabajo fue financiado por MGM Resorts International.